Encontramos estos arbustos en una amplia gama de variedades.
Esta planta es conocida por su resistencia y su bonito follaje siendo una excelente elección para los que buscan dar un toque especial a su jardín. La podemos encontrar en distintas variedades muy diferentes en cuanto al color de sus hojas, que van del verde a las variegaciones amarillas o crema, eso es lo que hace realmente especial a este arbusto, su amplia gama de variedades, en las que cada una de ellas tiene características únicas, que le dan ese encanto particular.
Los Euonymus japonicus se utilizan normalmente como planta ornamental en jardines, terrazas, patios y balcones, ya sea formando un seto formal, borduras o macizos en combinación con otras arbustivas y como acento en macetas. También se utiliza para formar topiarios o formas decorativas. En otoño e invierno siguen luciendo igualmente por su carácter perennifolio.
Resumiendo, son varias las razones para cultivar estos Euonymus japonicus: la luminosidad que nos aporta el follaje, especialmente en los cultivares variegados, su adaptabilidad al frío y al calor, la tolerancia a la poda y a la contaminación urbana, su adaptación a todo tipo de suelos, entre otras, nos pueden revelar el éxito de estos arbustos.
El origen del Euonymus japonicus.
Este arbusto tiene su origen principalmente en Japón, como sugiere el nombre específico ‘japonicus’. El nombre “Euonymus” deriva del griego y significa ‘buen nombre’, o ‘nombre bueno’.
Esta es de las familias arbóreas más extendidas del mundo, con alrededor de 445 especies diseminadas por Europa, Asia, Oceanía, Norteamérica y la gran isla africana de Madagascar. Está tan extendida gracias a las aves que degustan sus semillas, nacidas dentro de bayas abiertas entre sus hojas que están rodeadas de una pulpa carnosa muy apetecible para numerosas especies de pájaros que, de forma natural dispersan estas semillas una vez ingeridas allá por donde van.
Son plantas muy extendidas de las que derivan multitud de subespecies y tipos de arbustos de hoja perenne que pertenecen a la familia Celastraceae. También se les conoce como bonetero, evónimo,… y a lo largo de los años no han dejado de dar pie a nuevos cultivares verdes o con variegaciones más o menos llamativas.
¿Cómo es el Euonymus japonicus?
Son arbustos perennifolios de crecimiento lento. Dado que hay muchas variedades, también hay mucha variedad en cuanto a características. Sus hojas, normalmente en tamaño van desde 3 a 7 cm. de largo. Tiene distintas formas: ovales, elípticas, estrechas. Su textura es coriácea. Los que más crecen y alcanzan mayor esplendor son los que nos ocupan los Euonymus japonicus. Y entre las variedades más populares las siguientes:
Euonymus japonicus Aureomarginatus:
Este arbusto perenne atractivo y versátil, es muy apreciado por su follaje verde brillante y su borde dorado distintivo, que agrega interés visual a cualquier jardín o paisaje. Las hojas son ovaladas, lanceoladas y de textura coriácea, por lo que son resistentes y duraderas. Su crecimiento es moderado alcanzando alturas de hasta 2-3 metros con un ancho similar. Tiende a tener una forma compacta y redondeada. Produce pequeñas flores verdosas en primavera, que no son muy llamativas. Estas flores son seguidas por cápsulas de color rosado a rojo que contienen semillas, que son decorativas pero no son su principal atractivo.
Euonymus japonicus ‘Mediopictus Luna’:
Es una variedad atractiva y versátil, apreciada por su follaje variegado con el que crea interés visual a cualquier espacio y complementa además una variedad de plantas en el jardín. Presenta hojas lanceoladas de textura coriácea de color verde oscuro con un patrón variegado de color blanco o crema que se encuentra principalmente en el centro de la hoja, lo que crea un efecto de ‘luna creciente’ o ‘media luna’. Su crecimiento moderado puede alcanzar alturas de hasta 1-2 metros con un ancho similar. Tiende a tener una forma compacta y redondeada. Produce flores pequeñas y verdosas en primavera, sin valor oramental, estas son seguidas por cápsulas rosadas a rojas que contienen semillas, pero su principal atractivo radica en su follaje variegado más que en sus flores y frutos.
Euonymus japonicus Microphyllus:
Este es un arbusto compacto, denso y de crecimiento lento, que alcanza una altura de 1-1,5 metros con un ancho similar. Su forma es redondeada y compacta. Las hojas son pequeñas y perennes, manteniendo su follaje verde durante todo el año. Las hojas son más pequeñas en comparación con otras variedades de Euonymus japonicus. Sus pequeñas flores verdosas las vemos en primavera, seguidas por esas cápsulas rosadas a rojas que contienen semillas, siendo flores y frutos de escaso valor ornamental.
Su variedad ‘Albovariegata’ presenta hojas de un verde intenso, pero su borde es níveo, como pinceladas de pintura blanca, lo que le da un toque sofisticado y distintivo. Esta característica le permite capturar y reflejar la luz de una manera única, añadiendo luminosidad y un contraste visual impresionante a cualquier espacio.
Cuidados del Euonymus japonicus.
Su ubicación en el jardín debe de ser a pleno sol para que crezca de forma compacta. Si la insolación es fuerte, admite la sombra parcial, aunque es necesario que tengan el mayor número de horas de sol directo posible para que su follaje no varíe en color y luzca brillante. Al ser una planta resistente y tolerante a la contaminación, la hace adecuada para su uso en entornos urbanos. Resisten bien el frío invernal y las condiciones costeras.
En cuanto a suelo, lo prefiere fértil, fresco, ligeramente ácido y con muy buen drenaje. Si plantamos el Euonimus japonicus en macetas o jardineras, en la base pondremos una buena capa de grava o arcilla expandida. Utilizaremos un sustrato para plantas de exterior. El trasplante siempre lo realizaremos en primavera.
Una vez establecida la planta es generalmente resistente y de bajo mantenimiento. Por lo que el primer año su riego será regular para que se establezca de forma adecuada, pero después… soporta cierto grado de sequía, aunque eso no quiere decir que no se riegue, lo haremos de forma moderada.
El Euonimus japonicus no es muy exigente en cuanto a fertilización. A principio de la primavera un abonado con un fertilizante equilibrado será suficiente.
Al final del invierno o principio de primavera antes de que comience el nuevo crecimiento, realizaremos si es necesario una poda de formación para mantener su forma. Es una manera también de controlar su desarrollo y darle el aspecto y tamaño que deseemos.
Si lo queremos reproducir, se puede hacer por semillas que se pueden recolectar maduras de las cápsulas de los frutos, las dejaremos secar y se sembraran en primavera u otoño. También podemos hacerlo por esquejes tomados de la planta madre en primavera o verano.
Plagas y enfermedades del Euonymus japonicus.
Aunque es una planta muy resistente a plagas y enfermedades por su rusticidad, puede ser susceptible por cultivos colindantes a plagas como la cochinilla o la araña roja. También las orugas de la mariposa Hyponomeuta cognatellus la pueden atacar, estas orugas, tejen sus nidos sedosos con las que envuelven las hojas de las que se alimentan. El monitoreo regular de la planta es recomendable y su tratamiento ante cualquier signo de infestación con insecticida o acaricida apropiado o mediante métodos naturales.
En cuanto a enfermedades, el Euonymus japonicus puede ser atacado por la Roya y el Oídio. Debemos para evitar y prevenir estos problemas mantener un buen drenaje y evitar el exceso de humedad en las hojas.
Los Euonymus nos dan un toque de elegancia y naturaleza a nuestros espacios, mientras disfrutamos de una planta de bajo mantenimiento y alta recompensa visual.
