Llamativa por los frutos que además de coloridos son comestibles.
La especie Capsicum annuum es una de las plantas hortícolas con más diversidad que podemos encontrar en mercado y la conocemos popularmente como pimiento.
Los hay dulces y picantes, de diferentes formas y colores. A todos nos suenan el pimiento de padrón, tipo italiano, tipo morrón, de ñora, etc. pero en este artículo vamos a tratar el pimiento picante, y más concretamente el ornamental que por cierto, según la variedad, también puede ser utilizado como especia por su aporte picante en gastronomía.
Al Capsicum annuum ornamental no le gusta el frio ni las heladas por lo que se cultiva principalmente como planta anual de una sola temporada. Se utiliza en especial en macetas para patios, balcones y terrazas. También en interiores con buena iluminación resulta muy decorativo.
Encontraremos esta planta en el mercado a partir de primavera en maceta y la verdad es que da mucha vida al lugar donde la ubiquemos por los colores de sus frutos, que son tan alegres que es difícil no sentirse alegre al verlos.
El Capsicum annuum ornamental queda perfecto plantado directamente en el suelo del jardín formando pequeñas borduras de colores, aunque con el frío del invierno lo sustituyamos por otra anual como los pensamientos por ejemplo.
El origen del Capsicum annuum
El género Capsicum spp pertenece a la familia Solanaceae. Comprende unas cincuenta especies de plantas herbáceas que tienen su origen en América meridional, especialmente de Brasil. Algunas especies son Capsicum annuum, Capsicum baccatum, Capsicum frutescens, Capsicum mirabile, Capsicum rhomboideum…
Tal y como hemos avanzado, de forma coloquial, el Capsicum annuum ornamental, que es el que nos ocupa, recibe otros nombres populares según culturas, como guindilla, cayena, ají, chile, pimiento ornamental, pimiento enano, pimientillos, pimiento de adorno, ají decorativo…
¿Cómo es el Capsicum annuum?
Es una planta herbácea arbustiva de porte compacto, no muy ramificado y que alcanza hasta los 30 cm de altura. Su crecimiento es rápido y los tallos son algo leñosos y curvados.
Las hojas simples, son alternas y de color verde brillante. Son estrechas, lanceoladas y tienen los nervios bastante marcados.
Las flores que aparecen en primavera-verano son simples, pequeñas, blancas y poco decorativas para lo que lo son sus frutos. Estos son los que llaman la atención. Son pequeños pimientos alargados y redondeados acabados en punta, que pueden medir de dos a tres cm de largo y que crecen de forma vertical sobre el extremo de sus tallos, en solitario o en grupos. Los frutos son huecos de piel lisa y brillante, carnoso pero sin jugo presentan en un principio un color verde y cambian de color cuando maduran, son muy ornamentales y pueden ser amarillos, naranjas, rojos y púrpura.
Estos frutos son comestibles y según la variedad más o menos picantes que se utilizan normalmente para condimentar platos dándole un toque picante. Cada año aparecen nuevas variedades, las últimas producen los frutos de colores violetas, blancos y negros.
Cuidados del Capsicum annuum
Necesitará de una exposición a pleno sol y una alta humedad ambiental, aunque en interiores bien iluminados también puede crecer. Estamos ante una planta que no soporta el frío, digamos que para ella, la temperatura media anual debe ser suave, entre los 21 a 25C.
Como decimos al comienzo del artículo es mejor su cultivo en maceta. Prefiere un suelo de textura media, rico en materia orgánica y con un buen drenaje. Un sustrato universal o para huerto urbano le irá fenomenal. Sí que incorporaremos a la maceta en su base, una capa de grava o arcilla expandida para que tenga un buen drenaje, ya que es fundamental para su buen desarrollo.
Debemos regar el Capsicum annuum ornamental de forma frecuente, que el sustrato esté regularmente húmedo, pero nunca encharcado.
El pimiento ornamental produce los frutos de manera muy rápida, por ello necesita que le aportemos nutrientes en el agua de riego, así que le aplicaremos abonos cristalinos ricos en potasio, que favorecen el desarrollo de flores y el cuajado de frutos cada 10 días.
Es una planta que no necesitará de poda, a no ser que la cultivemos a partir de semilla. Entonces cuando sus primeros brotes crezcan iremos pinzando para obtener una planta compacta y con muchos frutos.
Para el Capsicum annuum la técnica de multiplicación que se suele realizar es por semilla en primavera, por la luz y la temperatura, que es más adecuada para su desarrollo.
La capsicina es la responsable de su picor y dependiendo de la variedad es más o menos picante. Los frutos maduran durante agosto, septiembre y octubre. Se pueden consumir tanto frescos como secos, enteros o molidos.
Estos frutos del Capsicum annuum ornamental se recogen a lo largo del verano o a inicios del otoño, dependiendo del fin al que se vayan a emplear, bien sea para fresco o para frito. Se recogen cuando comienzan a colorear para encurtir; cuando están verdes se utilizan como condimento y cuando maduran totalmente, se dejan secar y podemos guardarlos enteros en frascos de cristal para utilizarlo cuando se considere o retirar las semillas, molerlos y guardar igualmente.
Plagas y enfermedades del Capsicum annuum
Al ser un cultivo al aire libre, es fácil que se vea afectado por plagas y enfermedades de cultivos colindantes, por lo que si nos encontramos con ellas las podremos combatir con pautas y los productos adecuados que el cualquier centro de jardinería encontraremos.
No descuidemos el riego, si vemos que las hojas se marchitan puede ser debido a la falta de agua, pero no olvidemos que no debemos encharcar la planta. Si las hojas amarillean puede ser por falta de nutrientes.
En cuanto a plagas serán los pulgones, la mosca blanca principalmente, pero también pueden visitarla los ácaros y el escarabajo de las hojas y las orugas. De forma preventiva un insecticida polivalente los puede alejar, aunque no debemos olvidar que su fruto es comestible y hay que dejar un plazo de seguridad antes de recolectarlo.
En cuanto a enfermedades, un encharcamiento que debilitaría a la planta sería lo que favorecería la aparición de hongos tipo Phythophtora y Phytium.
Con una planta solamente, después de lucirla, podemos surtirnos de estos frutos para todo el año.
